martes, 30 de diciembre de 2008

Soledad

Trenzados cabellos,
(En)Trampa, tu mirada…
Brasas, alma en llama.
Condena.

Me encadenas
A tí por siempre

No.
nonono

Libro batalla ante tu beso fatal
(Tentación que no resistiré)
Quizá gane, pero la guerra sigue…

Me atraes, te deseo
Se que no…
Que no debo.

Olvidar todo por ti,
Esa es mi condena

Te creo
compañera más sincera,
quizá amiga,
la más cercana.

Pero posesiva,
celosa,
me atas a tus lágrimas.

Ay, lo sé.
La libertad: si no te toco
si no me enamoras
si ya no me acompañas
Me persigues
Me atormentas

Me seduces…

Adrienne

5 comentarios:

Gwen dijo...

Adrienne querida, ¿le escribis a la Soledad o a La libertad?
La primera te hace prisionera, te ata con su seducción y te condena a sus caprichos. ¿Es la segunda la responsable de perder la batalla? Es la libertad la que te deja elegir quien te seduce...¿te deja? ¿Alguna vez somos libres, o es una simple utopía más?

Amo ser libre, cuando la libertad me lleva por el camino correcto ;)

cya!!

Anónimo dijo...

Ahora que lo decís, en este texto se puede ver una tensión entre libertad y soledad. Soledad, como prisión, y libertad, como salvación.
Igual soledad se dice de múltiples maneras.

Poenele, si consideramos los cuentos de ciencia ficción que tanto te gustan, parece haber un afán por parte de la humanidad por encontrar a UN OTRO.
En este caso, la libertad (la libertad creativa de la tecnología podríamos pensar) parece ser el medio, impulsado por la soledad, por el cual se intenta buscar ese otro.
Ese otro a su vez también es una amenaza ya que hay mucha tensión dominado-dominación en estos cuentos. La búsqueda de la no-soledad, entonces, no es necesariamente la alusión a la libertad, es más, la libertad podría hasta ser considerada hermana de la soledad en tanto se preserva lo propio, sin límite externo.
Bueno, esta es otra lectura posible.

Pero en este texto, pensá que es del 2000, creo que se orienta más bien a la búsqueda por parte de una adolescente de 15 años en un momento en el que se empieza a independizar, a hacer cargo de responsabilidades, decisiones, eleeciones (y de sus consecuencias), en un momento en el que se abre al mundo y debe elegir si entragarse o no.

Cariños y feliz año.

Anónimo dijo...

Si la libertad te condena a estar solo, porque en tu libertad resulta que elegís la tentación de la soledad, entonces esta libertad no es la simple elección libre. Hay una determinación absoluta, o casi: la trampa inevitable que tiende la comodidad o seguridad aparente de la soledad.

Gwen dijo...

Hmm..
Cuanto por decir.

Primero, me fascino tu postura, Adrienne, con respecto a mi amada Csi Fi. La libertad creativa busca Universos más allá de lo conocido. Aunque, no creas que siempre encuentran en su imaginación, companía en el espacio. Normalmente sólo expanden la naturaleza a humana a un escenario más amplio y con muchos más recursos.

Con respecto a la Soledad, no creo que sea opuesta a la libertad. Por el contrario, creo que lo común es renunciar a ciertas libertades con tal de no permanecer solos. Libertad y Soledad son amantes, y prefiero permanecer lejos de esa pareja. Más que querer libertad, prefiero ser capaz de elegir la decoración de la celda donde pasaré el resto de la vida prisionera.

No me confundas con pesimista, como me conocés, sabés bien que no lo soy. Pero sí sé que somos endemoniadamente sociales, que dependemos de los otros aunque no nos demos cuenta y que nuestras elecciones de "libertad" generalmente fueron planeadas con un beneficio para determinado "Gran hermano".

Pensamos, decimos, nos vestimos y comemos lo que socialmente aprendimos... aun cuando nos rebelamos... por eso, ni libertad ni libre albedrio.. felicidad y conciencia de que estamos eternamente condicionados!!!!!

Aunque sí podrias llamar "libertad" el elegir hacer lo que hacen los otros... como entiendo el comment del sr. sin nombre. Cuestiono esa definición de libre albedrio.

Te quiero!!
Gwen*

Adrienne dijo...

Este texto es del 2000...